Los secretarios generales de ambas centrales en Río Cuarto coincidieron en que el crecimiento de la economía permite a los empresarios afrontar ese incremento que alcanzaría a sólo 300 mil trabajadores
Las conducciones sindicales de la CGT y la CTA Río Cuarto salieron ayer a apoyar el pedido de aumento del salario mínimo vital y móvil de los 1.840 pesos actuales a 2.600 al considerar que “están dadas las condiciones para que las empresas lo puedan afrontar”, coincidieron.
En medio de la puja nacional desatada entre el sector de los trabajadores y la Unión Industrial Argentina (UIA), en representación del empresariado, los dirigentes locales aseguraron que el beneficio alcanzaría además a sólo 300 mil empleados sobre un total que supera los 10 millones en el país.
“El monto no es caprichoso y tiene que ver con una realidad del país que está en constante expansión. En ese marco, el salario mínimo vital y móvil debe representar el 60% del promedio de los haberes de convenio que hoy se ubica en unos 4.200 pesos”, explicó Eduardo Tello, titular de la CGT regional Río Cuarto.
El dirigente sindical destacó que “sin embargo no hay que perder de vista que estas tensiones se dan en un marco de crecimiento económico innegable y que son parte de la puja por la distribución de la riqueza que un sector del empresariado se esmera en resistir”, apuntó.
Por su parte, Federico Giuliani, secretario general de la CTA, destacó que “la convocatoria del Consejo del Salario para discutir estos temas vuelve a llegar tarde, después de que todos los gremios cerraran sus paritarias. Para nosotros esto debe ser un espacio de trabajo permanente en el que no sólo se busque la foto del acuerdo una vez al año sino que además se avance en otras comisiones que están paralizadas como la de condiciones laborales”, indicó el referente de ATE.
Giuliani advirtió que “nosotros hablamos de 2.700 pesos porque nuestro Instituto de Estudios Económicos de la CTA publicó su estudio de la canasta familiar por un valor de $5.640 y de ese monto el 80% sería el salario básico de convenio. A su vez, el 60% sería el Mínimo Vital y Móvil que reclamamos”, indicó Giuliani.
El secretario general de la CGT destacó además que “no es correcto hablar de porcentajes generales de incremento porque es muy relativo. Depende a qué convenio se lo aplique resulta bueno o escaso”, indicó. Para Tello, el pedido de los sindicatos “es sin dudas razonable”.
Giuliani, por último, destacó la necesidad de que “una vez acordado el monto que el Estado también se encargue de controlar el cumplimiento de lo establecido en el Consejo del Salario porque muchas veces después, incluso en la Municipalidad con las cooperativas, no se termina respetando. De todos modos, desde ya no vamos a firmar nada que esté por debajo del monto de $2.600 y si alguien lo firma que pague el costo político correspondiente”, señaló el dirigente de los estatales.
Las voces del sindicalismo local
Eduardo Tello: “El monto no es caprichoso y tiene que ver con una realidad del país que está en constante expansión. En ese marco, el salario mínimo vital y móvil debe representar el 60% del promedio de los haberes de convenio. Y hay que remarcar que las tensiones se dan en un marco de crecimiento económico innegable y que son parte de la puja por la distribución de la riqueza que un sector del empresariado se esmera en resistir.
Federico Giuliani: “Una vez acordado el monto que el Estado también se encargue de controlar el cumplimiento de lo establecido en el Consejo del Salario porque muchas veces después, incluso en la Municipalidad con las cooperativas, no se termina respetando. De todos modos, desde ya no vamos a firmar nada que esté por debajo del monto de $2.600 y si alguien lo firma que pague el costo político correspondiente”.
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