Apuntes para el debate

"Necesitamos poner de pié a nuestra Central. Una Central abierta a todas las luchas del país, con una concepción política clasista que sepa darnos una caracterización correcta de la Argentina que vivimos. Una Central creíble y objetiva, capaz de señalar cuando las políticas gubernamentales son más de lo mismo y no van al fondo de la cuestión".

"Nuestro Congreso Federal de Delegados tiene que hablar con claridad a los trabajadores y trabajadoras y el pueblo. Hablar con valentía y decir las cosas como son. Por este camino nuestros congresos seguirán siendo un hito en la historia.

Van siete años de este Gobierno y no sólo no nos han dado la Personería Gremial o continúa la falta de libertad y democracia sindical, sino que, lo que es más grave, continúa la regresividad en la distribución de la riqueza y se profundiza la dependencia en lo que hace a la estructura productiva.

Venimos a ratificar nuestro compromiso con la Constituyente Social en dirección al Movimiento Político, Social y Cultural de Liberación. Compromiso que a su vez realimenta el desarrollo de la Central.

No somos una Central partidista, pero tenemos opinión y posiciones claras en torno a la injusta matriz de distribución del ingreso, al saqueo que ejercen los monopolios imperialistas de nuestros recursos naturales y a la brutal estafa que constituye la deuda externa que ningún gobierno a dejado de pagar. Tenemos opinión sobre salud, educación, previsión social y vivienda y queremos un país donde institucionalmente nuestra Central pueda incidir en las políticas de Estado. No queremos estar colgados de la falda de ningún partido político a la hora de hacer valer nuestro pensamiento. Tampoco estamos dispuestos a ser “la pata social” o la “columna vertebral” de ningún partido o gobierno. Estamos convencidos que si no son los trabajadores los que encabezan el proceso de liberación nacional y social éste quedará trunco.

Por ello, este Congreso debe contribuir al debate del movimiento popular con un conjunto de propuestas sin las cuales no se estará transitando un camino emancipatorio.

Tenemos que recuperar el tiempo de gozar y ser felices. Como decía el Che Guevara somos felices cuando “lo extraordinario se vuelve cotidiano”. Todavía no podemos hacer una revolución en nuestro país, pero sí podemos hacer una revolución dentro de la Central, y si lo podemos hacer, lo extraordinario va a ser cotidiano porque vamos a empezar a ver que todo lo que hagamos va a ser en función de construir una nueva experiencia de poder popular en la Argentina".