La intolerancia de la burocracia desencadenó en una tragedia

El Círculo Sindical de la Prensa y la Comunicación de Córdoba (Cispren) repudia los actos de violencia que dejaron el trágico resultado de dos víctimas fatales y varios heridos, luego del enfrentamiento entre miembros de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra) en la ciudad de Rosario.
La confrontación se desencadenó con el intento por parte de una facción identificada con la conducción nacional -enrolada en la Confederación General del Trabajo (CGT)- de tomar la sede de Atilra Rosario, que milita en la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA).
El edificio fue defendido por dirigentes del gremio y de otras organizaciones, que se encontraban reunidos para una conferencia de prensa en la que se iba a denunciar lo sucedido el 27 de noviembre, “cuando unos 300 hombres de la conducción nacional entraron al depósito de Sancor donde estábamos reunidos y golpearon a veinte compañeros”, según relató Luis Vega, titular local del gremio.
Esta vez, un número similar de alineados con la conducción nacional intentó tomar el gremio lo que, con la contribución de la pasividad de las fuerzas policiales, derivó en la tragedia que dejó como saldo dos heridos mortales con arma de fuego y una decena de heridos.
El Cispren manifiesta su rechazo a la violencia y la intolerancia desplegadas en el contexto de una verdadera declaración de guerra de la CGT contra la CTA, para evitar el reconocimiento de su personería gremial y disuadirla de su lucha por la libertad sindical. Además, exhorta a las autoridades públicas a investigar este episodio hasta las últimas consecuencias y garantizar la paz social poniendo coto a la impunidad de las patotas parasindicales.

Alexis Oliva		Guido Dreizik
Secretario de Prensa		Secretario General