"Hay que cambiar el código de faltas de la provincia"

Afiche difusión

Después de ver el documental "Valió la pena", que cuenta la experiencia de AMMAR en todo el país, los presentes a la primera función del Ciclo de Cine y Política Rodolfo Walsh debatieron durante más de hora y media sobre la situación actual de las trabajadoras sexuales en la provincia, y especialmente en nuestra ciudad que se caracteriza por el alto grado de violencia y brutalidad que sufren varias compañeras de parte de la policía que reprime y las pone en situación de vulnerabilidad, ante lo cual es inevitable que tengan que depender de los cafizzos o cafiolos que se quedan con el 50% de las ganancias de las chicas.
Eugenia Aravena, junto a Blanca y Marcela (militantes de AMMAR) nos hicieron un mapeo sobre como es la realidad en Río Cuarto, ese Río Cuarto oculto por los medios de comunicación que no dan a conocer las cifras escalofriantes sobre la cantidad de menores que son obligadas a prostituirse, la situación de explotación, la trata de personas, y lo que es distinto a esto la persecución de las trabajadoras sexuales que lo hacen por elección propia porque es la única forma de llevar un poco de pan al hogar. En conjunto, los compañeros presentes en el ciclo coincidieron en lo necesario de visibilizar la problemática, el temor de las compañeras para organizarse, y la urgencia de trabajar sobre los hechos de represión y violencia que la policía propina sobre ellas, siempre con la excusa de que se encuentran amparados por el código de faltas de la provincia.

Es así que se debatió sobre lo prioritario que se vuelve modificar el código de faltas actual que juzga al pobre por ser pobre, lo reprime, lo margina... ante esta situación es necesario comenzar a discutir en el seno de la sociedad estos temas que permanecen en las sombras, y también pedirle al poder político local de turno audiencias para que comience a tomar cartas en el asunto. También se coincidió en el pedido de audiencia al nuevo comisario de la policía provincial, a la secretaria de derechos humanos de la provincia y a la de la mujer.

Ya es hora, no debemos quedarnos más con los brazos cruzados viendo como siguen cayendo compañeras en las calles por luchar y denunciar y buscar llevar el alimento a sus casas, como fue el caso de Sandra Cabrera, crimen que aún continúa impune.

*Fotos y líneas: Julia Giuliani

Sec. gral. CTA Carlos Valduvino y Eugenia Aravena de AMMAR