La Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) repudia la decisión de la jefatura de la Policía de Río Cuarto de disponer de vehículos y personal no identificable patrullando la ciudad so pretexto de frenar una ola delictiva y advierte que esta medida, alentada por el coro estable adepto a la “mano dura”, sólo servirá para profundizar la criminalización de la pobreza.
“En esta ciudad, cuna del “boom” sojero, donde existen 18.500 menores de 18 años que viven bajo la línea de pobreza y otros cinco mil que no están escolarizados, y después de un cuarto de siglo de reinstauración del sistema democrático, resulta inaceptable la pretensión de reactualizar la aplicación de métodos que fueran utilizados por el terrorismo de Estado y que han merecido el reproche generalizado del pueblo argentino”, indica un comunicado firmado por Carlos Valduvino y Federico Giuliani, secretarios general y adjunto respectivamente de la Central riocuartense.
La declaración añade que “la cárcel de Río Cuarto está colmada de jóvenes, morochos y pobres y los fines de semana las seccionales de policía se llenan de pibes de los barrios periféricos levantados por la CAP por obra y gracia del Código de Faltas de la Provincia sancionado durante el gobierno de Angeloz que autoriza a la policía a actuar como juez y parte”.
“ La CTA rechaza de plano el pase a la clandestinidad de una parte de los efectivos de la Policía de la Provincia , a la vez que convoca a las autoridades municipales y a las organizaciones políticas, sociales, culturales, de derechos humanos y religiosas de la ciudad a debatir seriamente un nuevo modelo distributivo para terminar con la desigualdad social y erradicar la impunidad”, agrega la nota.
Para la CTA de Río Cuarto, “la justicia social es el único camino para que no haya más pibes chorros ni ladrones de guante blanco. Para que deje de haber una justicia para ricos y otra para pobres. Para que se construyan más viviendas, escuelas y hospitales y menos cárceles”.
“En esta ciudad, cuna del “boom” sojero, donde existen 18.500 menores de 18 años que viven bajo la línea de pobreza y otros cinco mil que no están escolarizados, y después de un cuarto de siglo de reinstauración del sistema democrático, resulta inaceptable la pretensión de reactualizar la aplicación de métodos que fueran utilizados por el terrorismo de Estado y que han merecido el reproche generalizado del pueblo argentino”, indica un comunicado firmado por Carlos Valduvino y Federico Giuliani, secretarios general y adjunto respectivamente de la Central riocuartense.
La declaración añade que “la cárcel de Río Cuarto está colmada de jóvenes, morochos y pobres y los fines de semana las seccionales de policía se llenan de pibes de los barrios periféricos levantados por la CAP por obra y gracia del Código de Faltas de la Provincia sancionado durante el gobierno de Angeloz que autoriza a la policía a actuar como juez y parte”.
“ La CTA rechaza de plano el pase a la clandestinidad de una parte de los efectivos de la Policía de la Provincia , a la vez que convoca a las autoridades municipales y a las organizaciones políticas, sociales, culturales, de derechos humanos y religiosas de la ciudad a debatir seriamente un nuevo modelo distributivo para terminar con la desigualdad social y erradicar la impunidad”, agrega la nota.
Para la CTA de Río Cuarto, “la justicia social es el único camino para que no haya más pibes chorros ni ladrones de guante blanco. Para que deje de haber una justicia para ricos y otra para pobres. Para que se construyan más viviendas, escuelas y hospitales y menos cárceles”.
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